El domingo, 27 de agosto, comenzaba la nueva e ilusionante campaña el CD Utrera viajando hasta tierras jerezanas, para disputar el primer encuentro ante el Guadalcacín. Y lo hizo de una manera más que acertada, los de Miguel Ángel Montoya, salieron dominando el centro del campo y llevando las riendas del encuentro aunque a fuerza de ser sinceros sin crear ocasiones claras de gol. Fue Blanco, en el minuto 10, el que se plantó solo ante el meta local, Lebrón, pero disparó fuera, siendo la llegada más clara de los utreranos. Por su parte el Guadalcacín intentaba quitarse el dominio de los utreranos pero sin conseguirlo.
Pero todo cambió en el minuto 36, cuando Cachana veía la segunda tarjeta amarilla, por una dura entrada, por detrás, a un contrario y era expulsado. Indicar que tanto esta tarjeta como la primera que vio, en el minuto 26, fueron justas e innecesarias ya que ambas fueron por faltas duras y en el centro del campo muy alejadas del área del Utrera.
Estas tarjetas cambiaron el curso del partido y el Guadalcacín adelantó sus lineas buscando con más intensidad la meta de Ayala. Fue Candy, en el minuto 42, el que le ganó la espalda a la defensa visitante, se plantó solo delante del portero, poniendo el 1 a 0 en el marcador, corría el minuto 42 del primer tiempo.
Salió con más brío e intensidad el Utrera en la segunda parte, de tal modo que el que parecía que tenía un jugador menos era el Guadalcacín, y fruto del mayor dominio y mejor juego llegó el gol del empate en el minuto 54, cuando uno de los debutantes en la filas utreristas, Alex del Río, cogió un rechace de la defensa local y lanzó un tiro espectacular desde el borde del área, que ponía las tablas en el marcador.
Pero no quedó aquí la cosa, el Utrera quería más y se lanzó a por la victoria logrando dar la vuelta al marcador con un contragolpe perfecto lanzado por el guardameta Ayala y culminado por Pablo Haro, desde una posición muy parecida a la del primer gol.
El Utrera había conseguido merecidamente lo más difícil, darle la vuelta al marcador. Pero el paso de los minutos hicieron mella en la fuerza física de los utreranos, que empezaron a notar la falta de un hombre, esto unido a que los locales se lanzaron de manera desesperada al ataque hizo que Ayala se tuviera que emplear a fondo y acertadamente ante varios disparos locales, pero no pudo evitar que, en el minuto 87, Rosillo tras varios rechaces pusiera el resultado definitivo en el marcador.
De ilusionante se puede señalar el partido visto al Utrera pues ha ganado en presencia física con hombres como Samuel y Cachana. La presencia del primero hace que Cruz adelante su posición y tenga más presencia en el juego de ataque del Utrera. Ademas hay que resaltar el acierto de la secretaría técnica pues los fichajes han venido a sumar a la plantilla. Buenas maneras de los fichajes, destacando Samuel, tanto en el centro del campo como en la zaga tras la expulsión de Cachana.
Finalmente señalar que el próximo viernes, 1 de septiembre, será la ofrenda floral del CD Utrera a la Virgen de Consolación, a las 19:00 horas. Igualmente ya se ha señalado la hora del encuentro frente al San Roque de Lepe que se disputará a las 20:00 horas del domingo, 3 de septiembre.
FICHA TECNICA:
CD Guadalcacín: Lebrón; Pablo, Diego Galiano, Panzi, Alvaro; Rosillo, Rodri, Luis Castillo, Piñero; Canty y Juanan.
Cambios: Adrian por Pablo en el m. 66; Juanjo por Luis Castillo en el m. 70 y Rosales por Juanan en el m. 86
CD Utrera: Ayala; Dani Arcos, Cachana, Yoga, Alex del Río; Cruz, Samuel, Blanco; Pablo Haro, Facundo y Jairo
Cambios: Israel por Jairo en el m. 52; Pozo por P. Haro en el m. 68 y Titi por Blanco en el m. 75
Árbitro: el onubense José Vázquez Romero que mostró tarjetas al local Adrián y a los visitantes Yoga, Blanco, Israel y Cachana. A este último en dos ocasiones la segunda en el minuto 36.
El encuentro se disputó en el Municipal de Guadalcacín, ante unas 500 personas, con gran afluencia de seguidores utreranos. El césped artificial mostraba un buen aspecto en una mañana más otoñal que veraniega en la que en diversos momentos la lluvia hizo su aparición con gran intensidad.