La imagen de la Parroquia de San José está cambiando mucho en los últimos años. A las obras iniciales que sirvieron para mejorar la acústica del templo se sumaron la de restauración del retablo del altar, algunas imágenes del templo y el retablo del Sagrario. Ahora se han bendecido dos nuevos altares dedicados a las devociones de San Judas Tadeo y el Beato Fray Leopoldo que van creciendo en número de devotos.
Los nuevos altares, que se han situado a ambos lados de la nave central de la iglesia, han sido realizados por los restauradores de cabecera de San José, Sebastián Martínez Zaya y su colaborador, Jorge Ortiz, que son en parte los máximos responsables del cambio de imagen del templo que cuenta con la mayor feligresía de Utrera.
Muchas personas han colaborado en hacer realidad que estos dos retablos acojan a estas dos populares devociones que cada vez congregan más devotos que acuden a rezarles y en el caso de San Judas Tadeo, cada 28 de mes, a oír misa en su honor.
Desde el Consejo económico de la Parroquia, que han tenido que cuadrar las cuentas, hasta las devotas de San Judas Tadeo y Fray Leopoldo que con la venta de papeletas han ayudado, en parte, a sufragar los gastos de ambos retablos, pasando por los hijos de Diego Castejón, que han puesto todos los medios para transportar los retablos y Manuel Rojas que ha mediado para que los costes fuesen más reducidos. Todos han desempeñado un papel muy importante para este cambio de imagen en la Parroquia de San José.
Pero el párroco de San José, también, quiso tener un agradecimiento destacado para una mujer “tan tajante como la figura del Beato Fray Leopoldo”, María Moreno que ese día veía su sueño hecho realidad al bendecirse el retablo que acogería la imagen del beato.
