El PSOE de Utrera ha dado la voz de alarma por la situación de limpieza en los polígonos industriales de Utrera, especialmente el de la Morera.
Los socialistas de Utrera se hacen eco de las” constantes quejas por parte de los empresarios y demás usuarios de las zonas industriales de Utrera sobre la suciedad y la deficiente recogida de residuos y basuras”.
Según ha recordado el PSOE, “antes de ganar las elecciones, Francisco Jiménez, alcalde del PP, hizo una serie de promesas que, al llegar al gobierno, ha incumplido sistemáticamente. Prometieron mejorar la limpieza y la gestión de residuos en nuestras zonas industriales, pero La Morera y demás zonas industriales son la prueba de que no han cumplido”.
Para los socialistas, la situación de los polígonos industriales en Utrera “ha empeorado en este último año de gobierno del PP y ya es un clamor la opinión generalizada sobre la dejadez e inacción del gobierno municipal en cuanto a la limpieza y recogida de residuos”.
“Concretamente en los polígonos industriales, la acumulación de todo tipo de residuos, incluidos materiales peligrosos, está poniendo en riesgo la salud de todos los que trabajan allí y deteriorando gravemente la imagen del polígono. La situación es tan mala que determinadas zonas industriales parecen vertederos descontrolados”, añaden.
Para el PSOE de Utrera, “la inacción del gobierno municipal del PP es inaceptable. Aunque han prometido varias veces que tomarían medidas, no han hecho absolutamente nada. La única medida que han notado los utreranos en tema de limpieza y recogida de basuras ha sido en sus bolsillos, ya que hemos sufrido la subida injustificada de la tasa municipal en un 30 %. El PP prometió una Utrera más próspera, más habitable y más solidaria; a la vista está que las promesas se han convertido en vergonzosas mentiras”.
Los socialistas consideran “inaceptable que Francisco Jiménez espere a que el PSOE denuncie públicamente una situación para tomar cartas en el asunto”.
“Estamos hablando de cuestiones básicas que afectan nuestra calidad de vida diaria. Un alcalde debería liderar con visión y anticipación, no reaccionar a cuentagotas y solo cuando media una denuncia. Francisco Jiménez se ha convertido en un alcalde sin iniciativa y con un aparente desprecio por las necesidades de la ciudad, cuya única política es la de “apagafuegos”, donde solo se actúa cuando el clamor popular se vuelve insostenible, dejando a Utrera estancada en lugar de avanzar”.
