A finales de 2016 RENFE anunció un cambio de material que se ha traducido durante 2017 en el traslado hasta Cataluña de 11 trenes de Cercanías que prestaban servicio en la provincia de Sevilla.
El parque de vehículos se componía entonces de 15 trenes de la serie S-465, con cinco vagones cada uno, que han sido sustituidos paulatinamente por trenes de la serie S-464 enviados desde Cataluña, con menos capacidad y con diez años más de antigüedad.
El sector ferroviario de CCOO avisa de que estos traslados han provocado que en Sevilla se hayan perdido 2.000 plazas en los trenes de cercanías lo que ya está haciendo que se den problemas de capacidad en los trenes de la provincia, sobre todo, en la línea C1 que cubre el trayecto entre Lebrija y Lora del Río pasando por la capital y en horas punta de mañana y mediodía.
CCOO ya ha preguntado a RENFE sobre sus intenciones para solventar estos problemas a lo que esta, en el seno del Comité Provincial de Empresa, ha respondido que no tiene previsto que estas plazas se vayan a reponer bien con la incorporación o reincorporación de trenes o con el incremento de trenes en hora punta.
Además, la empresa ha admitido que los cuatro trenes de la línea S-465 que aún operan en Sevilla serán también enviados a prestar servicio a Cataluña.
Según el sector ferroviario de CCOO esta situación va a traer consigo, además de la masificación de los vehículos, una disminución de la calidad en el servicio prestado a los y las usuarias y a su vez podría redundar en una menor utilización.
Además, estos cambios de vehículos provocarán una reducción directa de las cargas de trabajo en mantenimiento y en limpieza, lo que puede suponer una disminución del nivel de empleo en el Taller de Fabricación de RENFE en Sevilla de alrededor del 10 %.
CCOO seguirá defendiendo el transporte ferroviario de Cercanías, que es el gran vertebrador de la movilidad ciudadana y que, además es una forma de transporte sostenible, cómodo y ágil.