La noche del lunes 23 de junio, víspera del día de San Juan, a pesar de ser la mas corta, es una de las que con mayor alegría se vive en las calles y barriadas de Utrera, pues celebran una jornada de convivencia entre vecinos y vecinas en una fiesta que cada vez cuenta más con la participación ciudadana.
Algunas calles sin muñecos vivieron estas convivencias engalanadas con banderas, en algunas zonas los muñecos para quemar era hecho por particulares y familias que querían celebrar esta festividad y en otras zonas era una asociación o peña quien lo organizaba todo para vivirlo por todo lo alto con todos los vecinos.
La barriada de Campo verde realizó un muñeco que representaba a “Mazinger Z”, en la barriada Virgen de Consolación se quemó a un muñeco en homenaje a un vecino que no pudo asistir al evento por su salud. El dibujo protagonista sigue siendo el animado “Bob Esponja” que protagonizó la hoguera de la Peña El Búcaro en la Barriada de la Renfe y la “Pepa Pig”, que fue realizado por una familia y quemada en el solar del matadero como en pasadas ediciones viene haciéndolo este grupo familiar en la puerta de su casa.
Uno de los muñecos que alberga bastante público es el de la barriada de las Veredillas que este año han realizado un perfecto “Obelix” sujetando a peso la torre de Santa María a la que no le faltaba ni un detalle como las ventanas, puertas incluso un campanero tocando sus famosas campanas.
La peña deportiva del Barcelona realizó su propio San Juan en el personaje del jugador de este equipo Puyol que fue quemado en la explanada que se sitúa enfrente de la peña.
De todas ellas, la que congrega a un mayor número de personas es la hoguera situada tras la iglesia de San José, que este año lo ha protagonizado dos “minions” de la película “Gru, Mi villano Favorito” que se quemó casi una hora más tarde de lo previsto debido a la ausencia de los bomberos ya que se encontraban trabajando en otra zona.
Así pasó la noche de San Juan que se clausuraba con la hoguera y los deseos de rigor para alejar la negatividad y los malos augurios.
